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Me acabo de levantar de la cama. No puedo dormir. Estoy cansada, me lo noto. Intento leer pero no me concentro. Me tiento a estudiar pero no he llegado a la locura y borro esa idea de la cabeza. No llego ni a apagar la luz. Sé que no me voy a poder dormir. Mi mente está demasiado despierta y mis pulsaciones son demasiado fuertes.
Hay un trastorno del sueño llamado "insomnio" que esta noche se me podría atribuir y que ojalá no me dure más noches porque las consecuencias que tiene no me gustan.
Sin embargo, algo está claro: no puedo dormir. Estoy alerta.
Dicen que puede ser el estrés el que lo provoque (sí, he tenido una semanita ajetreada), pero no es sólo eso. Llevo muchos años en teleco para que en octubre no me deje dormir la ---- carrera.
De todos modos, sé que es mi mente la que no me deja dormir, porque está dándole vueltas a algo, buscando puntos de vista, posibles interpretaciones... y sé que no llegará a ninguna conclusión. Al menos, esta noche.
¿Qué hacer? Pues ahora mismo escribir. Intentar despejar un poco esa mente difusa y contrariada, llena de desorden. Después, quizás intentar de nuevo la lectura y al final, intentar tras muchas vueltas en la cama, por fin dormir.
Buenas noches
3 comentarios:
Mar, desgraciadamente eso también me pasa. Pero no te preocupes, yo tengo la solución. Busca una serie cómica, un monologo, un trozo de un programa de televisión cómico y disfrútalo, ríe y acaba de verlo sin pensar en nada mas. Y justo al terminarlo, métete en la cama con esa sensación de bienestar que te a producido ese momento de risa.
A mi me funciona bastante bien.
gracias Ramón, intentaré seguir tu consejo para la próxima vez
;)
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