Íbamos a ver mundo pero al final nos hemos quedado por aquí y hemos aprovechado para ir a una feria que había cerca de Ouchy, por la parte del lago.
Allí nos hemos dado cuenta de algo importante: una feria es igual en todos lados.
Hay tómbolas, coches de choque, cacharritos para los niños, cacharritos para terminar mareado, cacharritos para que te timen, puestos de comida de todo tipo... y mucha gente chunga, niñatos sentados en los alrededores de los coches de choque, muchachos demostrando su fuerza en el aparato de pegar puñetazos, algunos afortunados con peluches que no pueden llevar de lo grandes que son...
Lo único que cambia es que en España esto sucede por la noche y aquí es por la tarde y decayendo conforme se va yendo el sol (aunque hoy era entendible, por el frío húmedo que hacía).
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