Ya sí que hace totalmente una semana que llegué.
Ya tengo el suelo barrido, las cosas del ikea colocadas en sus respectivos lugares, la mesa puesta en un lugar mejor, la cocina algo más limpia.. (sobre esto ya escribiré otro día), algunas fotos hechas y algo de tiempo para empezar a enseñarlas y a contar cositas.
Ayer sábado, fue la llamada "Nuit de Musées", es decir, como una especie de "Noche en Blanco" malagueña con los museos de aquí. Empieza lo que en Málaga sería el medio día y dura hasta un poco más de medianoche.
Así pues... ahí que fuimos los erasmus españoles.
Una sorpresa agradable fue comprobar que en el museo botánico se podía degustar vino de higo (sí, y está bien rico, eh?) y picar bizcochos, galletitas, mermeladas...
El museo olímpico me gustó bastante. Es lo que te puedes imaginar que es, y su sala de proyección es genial para descansar un rato.
Otro museo fue el que yo ya llamo "el museo de los cacahuetes". Y no porque hubiera una exposición de frutos secos, sino porque en ese, nos pusimos moraos de cacahuetes, en forma de tapas con nuestras cervecitas... Super!
El siguiente museo... bueno, en realidad, ¿¿¿eso era un museo???? Yo sólo vi un par de cuadros y lo demás eran barras de bebidas, música y pizarras para que los niños dibujaran.
El último fue el de historia, que también tiene cosas de zoología, también de minerales y piedras y yo qué sé qué más... porque ahí fue donde nos dimos cuenta que ya estaba bien de cultura y nos fuimos a buscar un papeo.
Lo que nadie nos avisó es que los transportes públicos normales no seguían hasta las 2am, como la apertura de los museos, y menos mal que pillamos el pyjama, que si no...
(pyjama: dícese del autobús que hay los fines de semana a ciertas horas para volver a casa, porque además, te deja casi casi en la puerta de casa, eh?)
Y con esto y un bizcocho... mañana me tengo que levantar para comprar mi tarjeta de la lavadora a las 8.
Así pues... os dejo con la panorámica que tengo desde mi ventana.
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