Mi pequeña foca ya ha sido lavada (como dice mi madre, desinfectada) y ha tenido su primera fiesta, con globos y cacahuetes incluídos.
Para la comodidad de los invitados, todos con sus mejores galas caseras, como las chanclas del padrino bien conjuntadas con los calcetines, no dudamos en bajar mi sofá callejero y cojo del salón y hacer de la entrada de mi bloque un nuevo salón.
La gente que pasó por allí no pudo disimular la sorpresa, sobretodo un vecino del segundo, que tenía fiesta en su casa y bajó dos veces a pedirnos por favor que subiéramos con sus amigos y él. El pobre no podía entender que estuviéramos haciendo una fiesta a un (lo digo en voz baja para no herir sus sentimientos) peluche. Y preguntaba en francés "¿¿pero qué habéis bebido?? ... ¿¿¿¿nada?????" Mira que le dijimos que éramos españoles... Yo creo que esto le va a marcar para el resto de su vida...
Y ahora tengo en mi casa más de un globo con el que no sé qué hacer (porque ya explotamos bastantes anoche). Así que si alguien quiere alguno, que se pase por aquí a recoger el que más le guste (bueno, el del gato y uno de colores ya están en la pared tuneada de mi cuarto...).
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