Banderas españolas por todos lados, camisetas, gorras, pinturas... y mucho guiri suelto que a mí no me engañaban, que tenían de españoles lo que las paellas que vendían a mi lado a
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Una vez terminado el partido, me he dado cuenta que aquí cada partido es como una final, y se celebra como tal. Al igual que el otro día los suizos dieron por saco de lo suyo con los cláxones, hoy los ¿españoles? o los hijos de españoles o los simpatizantes de la roja o yo qué sé quién, iban con sus coches adornados con las banderas y haciendo ruido para celebrar la gran victoria ante... Honduras.
En fin... todo sea por ser felices, no?
Y para terminar la noche, antes de volver a mi mesa llena de apuntes, un rato de concierto de músicas del mundo. Porque aquí en Lausanne no se puede negar que organizan un montón de cosas para la gente. Y lo mejor, de forma gratuita muchas de ellas.
Yo no quería decir esto pero... esta ciudad tiene algo, que a veces sorprende cuando menos te lo esperas; y te das cuenta que quizás, a pesar de haber sido un erasmus mierdoso académicamente hablando, está siendo un año distinto a cualquiera vivido. Se mire por donde se mire. Y la experiencia y los recuerdos de esta y en esta ciudad, van a quedar para siempre.
ole
2 comentarios:
- no comment sobre el examen de hoy...
- estoy un poco ronca... como tiene que ser tras un partido ;)
mmmmmmmm bueno piensa en k españa puede estar mas cerca. te kiero
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