Todo empezó ayer tarde, tras un día lleno de prisas para comprar las últimas cosas, hacer un poco de papeleo, preparar la maleta y hacer magia para poder meter lo máximo posible (entre lo que están el jamón, el lomo, las aceitunas o las ojaldrinas XD ). Tarde de cabalgata de Reyes Magos. Mi padre quería salir pronto, pero no contaba con que mi madre quería que pasara mis últimos momentos merendando con mi abuela, para escuchar lo tan preocupada que estaba por mi "excursión" hasta Suiza, y para repetirme como cien veces lo importante de mis llamadas y mis mensajes desde aquí.
En fin, ... cabalgata de reyes... Los autobuses haciendo rutas alternativas, un tráfico horrible por culpa de esto y de que era el día típico de ir a comprar de última hora, y mi padre y yo camino de la estación de tren.
Allí me esperaba el trenhotel que durante la noche hace Málaga-Barcelona, parando en yo qué sé en cuántos sitios. Mi gran butaca reclinable estaba preparada para mí, aunque con lo de los pies que no funcionaba (no se subían). Cuatro personas en mi vagón (o coche) y un aburrimiento atroz. Como no podía estudiar por miedo a marearme, opté por echarme a dormir prontito. De vez en cuando me despertaba y me veía con el cuello descoyuntado y miraba que todo seguía tranquilo.
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